LA COMPARSA DEL ALCALDE
La comparsa del alcalde
tiene una mujer florero;
bienvenida ha sido, pero
¡que no piense que es de balde!
Se le exige que respalde
lo que le imponga el autor,
y que a la parte mayor
(que son machos) se someta
y cante cada cuarteta
siempre en un tono menor.
¡Para que su voz de pito
no se note ni un poquito!
Jesús María Bustelo Acevedo
Dócima: composición poética de doce versos; los diez primeros se distribuyen conforme a una décima convencional, y los dos últimos resumen, simbolizan, replican o contradicen, en un pareado, los precedentes, o, simplemente, concluyen el poema.
Dócima XIX
HO'OPONOPONO
Libre como el colibrí,
y cual la llovizna, fresca,
es el alma gigantesca
y perenne que hay en ti;
blanca como el alhelí
es la verdad de tu vida,
tan eterna y bendecida
como la divina luz
que hace liviana la cruz
y es la tierra prometida.
¡Como el colibrí, sé libre,
sin que el mundo te calibre!
Jesús María Bustelo Acevedo
Libre como el colibrí,
y cual la llovizna, fresca,
es el alma gigantesca
y perenne que hay en ti;
blanca como el alhelí
es la verdad de tu vida,
tan eterna y bendecida
como la divina luz
que hace liviana la cruz
y es la tierra prometida.
¡Como el colibrí, sé libre,
sin que el mundo te calibre!
Jesús María Bustelo Acevedo
Dócima XVIII
CULPA
Culpa convertida en tos,
culpa convertida en llanto,
y convertida en el dios
del dolor y del quebranto;
culpa, culpa, que en un manto
de castigo justiciero
atormenta a un mundo entero,
tan romano y apostólico,
tan judío y tan católico
como el Judas traicionero.
¡Donde no impera la pulpa,
lo que gobierna es la culpa!
Jesús María Bustelo Acevedo
Culpa convertida en tos,
culpa convertida en llanto,
y convertida en el dios
del dolor y del quebranto;
culpa, culpa, que en un manto
de castigo justiciero
atormenta a un mundo entero,
tan romano y apostólico,
tan judío y tan católico
como el Judas traicionero.
¡Donde no impera la pulpa,
lo que gobierna es la culpa!
Jesús María Bustelo Acevedo
Dócima XVII
AUNQUE DIGA BLAS INFANTE
Aunque diga Blas Infante:
"¡Andaluces, levantaos!,
los que sigan acostaos
también tienen su talante.
Pues saben que es de ignorante,
siendo el hombre de la Tierra,
demandar que en una guerra
de ella misma se ande en pos,
que si vida te da Dios,
la muerte en ella te entierra.
Porque tu cuerpo es del suelo
y el alma entera del Cielo.
Jesús María Bustelo Acevedo
Aunque diga Blas Infante:
"¡Andaluces, levantaos!,
los que sigan acostaos
también tienen su talante.
Pues saben que es de ignorante,
siendo el hombre de la Tierra,
demandar que en una guerra
de ella misma se ande en pos,
que si vida te da Dios,
la muerte en ella te entierra.
Porque tu cuerpo es del suelo
y el alma entera del Cielo.
Jesús María Bustelo Acevedo
Dócima XVI
EL DIOS DE LOS PORTAZOS
Yo soy feliz con mis portazos,
me dan tal chute de energía
que me rebosa la alegría...
Yo soy feliz con los portazos,
que el maricón y sus abrazos
se energeticen a su modo;
yo en mis portazos lo hallo todo,
me hace sentir tan poderosa
como la reina vanidosa
que en todo el resto encuentra lodo...
¡Lodo del cual yo soy testigo
y entre portazos lo persigo!
Jesús María Bustelo Acevedo
Yo soy feliz con mis portazos,
me dan tal chute de energía
que me rebosa la alegría...
Yo soy feliz con los portazos,
que el maricón y sus abrazos
se energeticen a su modo;
yo en mis portazos lo hallo todo,
me hace sentir tan poderosa
como la reina vanidosa
que en todo el resto encuentra lodo...
¡Lodo del cual yo soy testigo
y entre portazos lo persigo!
Jesús María Bustelo Acevedo
Dócima XV
ME HE CONVERTIDO EN USTED
Me he convertido en usted,
cuando yo siempre fui tú...
¿Son cosas de Belcebú,
del reloj de la pared,
o de alguna extraña red
que teje la gravedad
con su universalidad
y su centrípeta ley
que afecta a toda la grey
menos a la Libertad?
¡Libertad del Creador,
que es la Verdad del Amor!
Jesús María Bustelo Acevedo
Me he convertido en usted,
cuando yo siempre fui tú...
¿Son cosas de Belcebú,
del reloj de la pared,
o de alguna extraña red
que teje la gravedad
con su universalidad
y su centrípeta ley
que afecta a toda la grey
menos a la Libertad?
¡Libertad del Creador,
que es la Verdad del Amor!
Jesús María Bustelo Acevedo
Dócima XIV
MENTE
La Mente es Una,
y Una la Vida,
que es concebida
sin tumba o cuna;
mas, oportuna,
sueña la mente
dementemente
que se separa
tan sólo para
hacerse Presente.
¡Es lo Diverso
del Universo!
Jesús María Bustelo Acevedo
La Mente es Una,
y Una la Vida,
que es concebida
sin tumba o cuna;
mas, oportuna,
sueña la mente
dementemente
que se separa
tan sólo para
hacerse Presente.
¡Es lo Diverso
del Universo!
Jesús María Bustelo Acevedo
Dócima XIII
LA IMPRESIONANTE HISTORIA DE SIGMUND FREUD Y LAS COMPLEJAS FUNCIONES DE LA MENTE (¡LÉALA EN LOS MEJORES BLOGS A PARTIR DEL 29 DE NOVIEMBRE!)
Sigmund Freud mapeó
las funciones de la mente,
aunque alguno ya lamente
que en el mapa se perdió.
Sigmund Freud descifró
con brillante verborrea
la verdad que en la azotea
se ocultaba, y si se oculta
a sí misma se sepulta
y en su tumba se recrea.
¡Por ello cuidate, guapa,
de perderte en ese mapa!
Jesús María Bustelo Acevedo
Sigmund Freud mapeó
las funciones de la mente,
aunque alguno ya lamente
que en el mapa se perdió.
Sigmund Freud descifró
con brillante verborrea
la verdad que en la azotea
se ocultaba, y si se oculta
a sí misma se sepulta
y en su tumba se recrea.
¡Por ello cuidate, guapa,
de perderte en ese mapa!
Jesús María Bustelo Acevedo
Dócima XII
PSEUDOCIENCIA
La pseudociencia se planta
en medio de la docencia,
porque una gran eminencia
con la misma se atraganta,
y es que al anciano le espanta
que ese novísimo invento
falte a cada mandamiento
de la doctrina científica,
tratando a su beatífica
fe cual si fuera un pimiento...
¡Que ya la Ciencia no duda,
que eso queda para Buda!
Jesús María Bustelo Acevedo
La pseudociencia se planta
en medio de la docencia,
porque una gran eminencia
con la misma se atraganta,
y es que al anciano le espanta
que ese novísimo invento
falte a cada mandamiento
de la doctrina científica,
tratando a su beatífica
fe cual si fuera un pimiento...
¡Que ya la Ciencia no duda,
que eso queda para Buda!
Jesús María Bustelo Acevedo
Dócima XI
SUSANITA TIENE UN RATÓN
La Susy tiene un ratón,
un ratón muy chiquitín
que me lo ha dejado sin
chocolate ni turrón...
¡Ah Pedrín!, cuya ilusión
fue tan sólo ser un gran
Presidén de Españistán
y ahora es un hombre común,
pues quien maneja el betún
no es su compi el catalán.
¡Y Pedrín en el andén
llora al ver marcharse el tren!
Jesús María Bustelo Acevedo
La Susy tiene un ratón,
un ratón muy chiquitín
que me lo ha dejado sin
chocolate ni turrón...
¡Ah Pedrín!, cuya ilusión
fue tan sólo ser un gran
Presidén de Españistán
y ahora es un hombre común,
pues quien maneja el betún
no es su compi el catalán.
¡Y Pedrín en el andén
llora al ver marcharse el tren!
Jesús María Bustelo Acevedo
Dócima X
ANA Y MÍA
La gordura no es cultura,
dice Mía y dice Ana
mientras miran con desgana
la comida que las cura...
Se alimentan de ternura
y aborrecen la ternera;
es lujuria la telera;
carne y pescado, pecados,
mas sienten santificados
sus huesos de calavera.
¡Y adoran como analgésico
a un Jesucristo anoréxico!
Jesús María Bustelo Acevedo
La gordura no es cultura,
dice Mía y dice Ana
mientras miran con desgana
la comida que las cura...
Se alimentan de ternura
y aborrecen la ternera;
es lujuria la telera;
carne y pescado, pecados,
mas sienten santificados
sus huesos de calavera.
¡Y adoran como analgésico
a un Jesucristo anoréxico!
Jesús María Bustelo Acevedo
Dócima IX
CAMINO A NEMANCOS
Camino a Nemancos...
Van los peregrinos
y los turigrinos,
los negros, los blancos,
los cojos, los mancos,
los que ponen peros
a los forasteros,
los que se los zampan...
¡y a la noche acampan
todos los viajeros!
¡Siempre vagabundos
de todos los mundos!
Jesús María Bustelo Acevedo
Camino a Nemancos...
Van los peregrinos
y los turigrinos,
los negros, los blancos,
los cojos, los mancos,
los que ponen peros
a los forasteros,
los que se los zampan...
¡y a la noche acampan
todos los viajeros!
¡Siempre vagabundos
de todos los mundos!
Jesús María Bustelo Acevedo
Dócima VIII
PLATICADORES DE UN CURSO DE MILAGROS
Escúchame, chica o chico,
lo que digo con dolor...
¡Callad al platicador,
que aquí sólo YO platico!
Lo que digo y significo
es que el otro no soy YO...
¡Por eso se equivocó
y por lo mismo YO acierto!
¡El otro es el que está muerto
puesto que se separó!
¡Pero yo ni me separo
ni reparo ni me paro!
Jesús María Bustelo Acevedo
Escúchame, chica o chico,
lo que digo con dolor...
¡Callad al platicador,
que aquí sólo YO platico!
Lo que digo y significo
es que el otro no soy YO...
¡Por eso se equivocó
y por lo mismo YO acierto!
¡El otro es el que está muerto
puesto que se separó!
¡Pero yo ni me separo
ni reparo ni me paro!
Jesús María Bustelo Acevedo
Dócima VII
EL PLACER Y LA CULPA
Palpa amoroso la pulpa
que da la Voz de tu Ser:
aquel que teme el placer
es que venera la culpa...
Por ello, no se disculpa
el gozo de la Alegría,
y se oculta en su sombría
oscuridad de la Luz,
y amargo carga su cruz
por el mundo cada día...
¡Y a la chica que disfruta,
siempre la pone de bruta!
Jesús María Bustelo Acevedo
Palpa amoroso la pulpa
que da la Voz de tu Ser:
aquel que teme el placer
es que venera la culpa...
Por ello, no se disculpa
el gozo de la Alegría,
y se oculta en su sombría
oscuridad de la Luz,
y amargo carga su cruz
por el mundo cada día...
¡Y a la chica que disfruta,
siempre la pone de bruta!
Jesús María Bustelo Acevedo
Dócima VI
OTRO POEMA DE AMOR
Otro poema de amor,
de alegría, de tristeza,
de corazón, de cabeza,
de placer y de dolor...
Que en todo está el Creador
que el alma alberga pequeño
más allá de todo sueño
de negarse en la unidad
donde está la libertad
y se disipa el empeño...
¡Que todo aquel que se empeña
huye del Dios con que sueña!
Jesús María Bustelo Acevedo
Otro poema de amor,
de alegría, de tristeza,
de corazón, de cabeza,
de placer y de dolor...
Que en todo está el Creador
que el alma alberga pequeño
más allá de todo sueño
de negarse en la unidad
donde está la libertad
y se disipa el empeño...
¡Que todo aquel que se empeña
huye del Dios con que sueña!
Jesús María Bustelo Acevedo
Dócima V
¡NO HAY DOLOR!
Si vemos con amor,
es amor lo que vemos,
que en el amor podemos
saber que no hay dolor,
como dijo el actor
en mitad de su duelo,
y eso es raro, me huelo,
mas normal en la Tierra,
que si el mundo es la guerra,
el amor es el Cielo...
¡Y allí no hay ningún Rambo
rufián y patizambo!
Jesús María Bustelo Acevedo
Si vemos con amor,
es amor lo que vemos,
que en el amor podemos
saber que no hay dolor,
como dijo el actor
en mitad de su duelo,
y eso es raro, me huelo,
mas normal en la Tierra,
que si el mundo es la guerra,
el amor es el Cielo...
¡Y allí no hay ningún Rambo
rufián y patizambo!
Jesús María Bustelo Acevedo
Dócima IV
¡SURCANDO LA GALICIA!
Como un cometa, vago
por toda la Galicia,
porque es una delicia
llegar a Santïago;
presente allí, ¿qué hago?,
que el que se para, yerra:
caminaré a Fisterra
(o sea, Finisterre),
que el menda, erre que erre,
va hasta el fin de la Tierra...
¡Y el que aquí vino, vino
a importarle un Camino!
Jesús María Bustelo Acevedo
Como un cometa, vago
por toda la Galicia,
porque es una delicia
llegar a Santïago;
presente allí, ¿qué hago?,
que el que se para, yerra:
caminaré a Fisterra
(o sea, Finisterre),
que el menda, erre que erre,
va hasta el fin de la Tierra...
¡Y el que aquí vino, vino
a importarle un Camino!
Jesús María Bustelo Acevedo
Dócima III
LOS PECHOS DE LA VIDA
Tus pechos mucho me gustan,
Tus pechos mucho me gustan,
hermosa Nidia García,
son vida, son alegría...
¿Por qué a algunos les disgustan?
Cuando los miran, se asustan
cual si fueran Belcebú,
pero no dicen ni mu
ante aquellos que maltratan
y disfrazados nos matan
cuando la vida das Tú.
¡Que son las prendas, temor,
y tu belleza el amor!
Jesús María Bustelo Acevedo
Docima II
MARIO
Mario dejó un comentario,
y luego se percató
de que Mario no era yo,
que era un tipo extraordinario...
¿Pero extraordinario Mario,
el del comentario o yo,
o era aquel y el otro no?
¿Y si extraordinario fuera,
no lo es ya porque lo era
y tal era terminó?
Voy a resumirte, pues;
¡Mario no sabe quién es!
Jesús María Bustelo Acevedo
Mario dejó un comentario,
y luego se percató
de que Mario no era yo,
que era un tipo extraordinario...
¿Pero extraordinario Mario,
el del comentario o yo,
o era aquel y el otro no?
¿Y si extraordinario fuera,
no lo es ya porque lo era
y tal era terminó?
Voy a resumirte, pues;
¡Mario no sabe quién es!
Jesús María Bustelo Acevedo
Dócima I
DE LA DÉCIMA A LA DÓCIMA
Esa vieja espinela
ahora se moderniza,
y la nueva se iza
por virtud de mi escuela;
cual escuela, se cuela
como la imposición
de una absurda visión
subjetiva y sujeta
a ese trato y la treta
de la propia versión...
¡Resumiendo, en mi pócima
le doy vida a la Dócima!
Jesús María Bustelo Acevedo
Esa vieja espinela
ahora se moderniza,
y la nueva se iza
por virtud de mi escuela;
cual escuela, se cuela
como la imposición
de una absurda visión
subjetiva y sujeta
a ese trato y la treta
de la propia versión...
¡Resumiendo, en mi pócima
le doy vida a la Dócima!
Jesús María Bustelo Acevedo
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